Enmarcado por el Día de Oración, celebrado el 10 de marzo de 2021 en todas las instituciones adventistas de la División Interamericana, el Colegio Obregón, de Cd. Obregón en Sonora realizó la Caravana de Servicio con sus alumnos de preescolar hasta bachillerato.
Los 255 alumnos de la institución participaron en las actividades en el Día de Oración que estuvieron clasificadas en seis módulos. Identidad, Fe, Unidad Familiar y Testificación se realizaron en grupos, el módulo de Perdón fue general a través de herramientas digitales, Servicio fue el único módulo realizado de manera presencial.
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La Caravana de Servicio fue parte del Servicio, en esta actividad la institución invitó a padres y alumnos acudir al colegio para dejar artículos esenciales para formar despensas que serían entregadas a familias con necesidad. Se lograron formar 15 despensas grandes que fueron entregadas el viernes 12 de marzo, a las que se les anexó la revista Enfoque de Nuestro Tiempo.
Las familias beneficiadas con los víveres, mencionaron en reiteradas ocasiones que la obra que estaba realizando el colegio en favor de ellos había sido voluntad divina. “Señor sorpréndeme este día, sé que tienes algo para mí” mencionó una mujer con lágrimas en los ojos, que prefiere no ser identificada.
La institución tiene el compromiso de compartir buenas obras con la comunidad y la manera práctica de hacerlo es sirviendo a las personas que los rodean. Según el pastor Manuel Sánchez, capellán del Colegio Obregón, los niños pueden recibir mucha teoría pero la vida práctica del servicio les permite conocer de primera mano el privilegio de manifestar el amor siendo útiles a la sociedad.
“Uno de los esenciales en los cuales se sustenta nuestro Modelo de Educación Adventista tiene que ver con ayudar a los más necesitados, naturalmente bajo el principio de Hechos 20:35, que dice que somos más felices cuando damos, que cuando recibimos”, recalcó el profesor Gonzalo Alarcón, maestro de la institución.
Las familias beneficiadas con los víveres mencionaron en reiteradas ocasiones que la obra que estaba realizando el colegio en favor de ellos había sido voluntad divina. “Señor sorpréndeme este día, sé que tienes algo para mí” mencionó una mujer con lágrimas en los ojos, que prefiere no ser identificada.
La institución tiene el compromiso de compartir buenas obras con la comunidad y la manera práctica de hacerlo es sirviendo a las personas que los rodean. Según el pastor Manuel Sánchez, capellán del Colegio Obregón, los niños pueden recibir mucha teoría pero la vida práctica del servicio les permite conocer de primera mano el privilegio de manifestar el amor siendo útiles a la sociedad.
“Uno de los esenciales en los cuales se sustenta nuestro Modelo de Educación Adventista tiene que ver con ayudar a los más necesitados, naturalmente bajo el principio de Hechos 20:35, que dice que somos más felices cuando damos, que cuando recibimos”, recalcó el profesor Gonzalo Alarcón, maestro de la institución.
Las familias beneficiadas con los víveres mencionaron en reiteradas ocasiones que la obra que estaba realizando el colegio en favor de ellos había sido voluntad divina. “Señor sorpréndeme este día, sé que tienes algo para mí” mencionó una mujer con lágrimas en los ojos, que prefiere no ser identificada.
Según la directora del plantel, la maestra Rosalva Honorato, las familias beneficiadas fueron elegidas por el conocimiento previo de la necesidad que las aqueja.
El Colegio Obregón abrió sus puertas para recibir los donativos, entre los cuales aparte de alimentos también había juguetes y pañales para bebés y adultos. Las dádivas fueron entregadas desde los vehículos y recibidas por los maestros de la institución, quienes adaptaron urnas para depositarlas.
Referente a la influencia que Caravana de Esperanza tiene en los estudiantes, el señor Genaro Hernández, padre de alumnos del colegio, mencionó: “los vuelve más sensibles y empáticos con las necesidades de los más vulnerables”, continuó diciendo que la actividad es excelente porque nos muestra que aún cuando nuestra situación puede no ser la mejor, siempre podemos ayudar a alguien más.
“Para mi como padre de familia, es esencial que mi hijo tenga la oportunidad de aprender a servir a otros. Por eso esta acción (la caravana) que pueden aprender y reforzar en el colegio, es fundamental dentro de las competencias que anhelo que mi hijo adquiera en su proceso de aprendizaje” recalcó el capellán de la institución, padre de un niño de preescolar del Colegio Obregón.
Anteriormente el Colegio Obregón había realizado una actividad similar, no en el Día de Oración. En aquella ocasión el colegio asignó a cada grupo un producto específico, esa vez el número de despensas fue mayor.
