Desde su inicio el 16 de marzo, han pasado más de dos semanas y parte de la Sierra Madre Oriental ha sido consumida por un voraz y veloz incendio, los estragos han causado según Forbes, daños en 7,000 hectáreas de los estados de Coahuila (Coah) y Nuevo León (NL). Protección Civil de NL estima que para sofocar completamente el fuego se podría tardar un mes y según ha advertido la Secretaría de Medio Ambiente de Coah., podrían pasar 50 años en recuperar la vegetación perdida.
El siniestro que ha sido categorizado como uno de los peores en años, ha provocado el desalojo de más de 400 familias de ambos estados y han sido reubicados en lugares seguros por Protección Civil, entre las familias afectadas se encuentran miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de la Misión Regiomontana y Asociación Noreste.
Tal es el caso de la iglesia Maranatha del distrito Provivienda, Misión Regiomontana, cuyos 40 miembros junto con los demás habitantes de la comunidad fueron evacuados por estar en una zona de alto riesgo.
Muchos de los miembros evacuados han encontrado refugio en casa de familiares en Monterrey y Montemorelos, otros más se encuentran en albergues en espera de poder volver a sus hogares para resguardar las pocas pertenencias que pudieron haber resistido la combustión.
Entre los miembros evacuados se encuentra el hermano Jesús Jiménez, que junto a su familia tuvieron que desalojar su hogar, perdiendo todo por el paso voraz del fuego.
“Nuestros miembros del distrito de Provivienda respondieron inmediata y espontáneamente al enterarse del siniestro, trayendo abundantes provisiones para apoyar no solo a los hermanos en crisis sino a toda la comunidad” – mencionó el pastor del distrito, Israel Hernández.
Los miembros de esta iglesia en Nuevo León aún no han recibido el apoyo provisto, esto será hasta que las autoridades otorguen la autorización de acercarse a los albergues, pero según la declaración del pastor Hernández “se encuentran más firmes que un roble, han demostrado que su fe es impresionante y contagiosa”.
Por el momento ADRA Noreste no está en la línea directa del fuego y se han dedicado a cubrir las necesidades de alimentación, agua y herramientas para los brigadistas y familias que perdieron sus hogares. Protección Civil invitó a la agencia, unirse al apoyo de los damnificados y brindar apoyo a los brigadistas que conforman miembros de la Guardia Nacional, SEDENA, CONAFO y colonos, al auxilio también se han unido brigadas de Durango y Tlaxcala.
ADRA en la Unión Mexicana del Norte a través de su director el pastor David Maldonado, ha recalcado la urgencia y necesidad de estos artículos en apoyo a los brigadistas que están trabajando 24 horas en el incendio: agua embotellada, bebidas hidratantes, galletas energéticas, artículos de higiene personal y sopas instantáneas, así como herramientas diversas, calzado para trabajar en escombro, mangueras para agua de 31/4, tinacos para 1000 L y tambos para 200 L, el enlace es con los ancianos, pastores y ministerio juvenil de las iglesias.
ADRA Noreste se ha planteado dos objetivos claves, el primero consiste en apoyar a los brigadistas con despensas, el segundo está relacionado con la construcción de viviendas con apoyos coordinados entre la Agencia y el gobierno.
“Siempre es una experiencia inolvidable y gratificante al servir y testificar del amor de nuestro Dios sirviendo al prójimo” – Manolo Acevedo, coordinador de ADRA Noreste.
ADRA ha unido esfuerzos con un grupo de aproximadamente 40 integrantes voluntarios autodenominado Los Jeeperos, que conforme avanza el incendio y las labores de rescate se han comprometido artículos de necesidad y los han llevado hasta los campamentos provisionales de Protección Civil.
Los Jeeperos no pertenecen a la Iglesia Adventista del Séptimo Día y durante estos días de arduo trabajo y de mirar a los ojos las nocivas llamas del fuego se han sentido impresionados por la organización y entrega que tiene la IASD con el prójimo. Los voluntarios están dispuestos y entusiasmados a seguir ayudando.
El equipo de brigadistas y Protección Civil se encuentran trabajando en la primera etapa que consiste en sofocar el incendio y acorralarlo para evitar que continúe expandiéndose a otros lugares, pero por el viento y las condiciones de la vegetación parece imposible lograrlo. Cuando se concluya esta etapa, empezará la labor de revisar y verificar que el terreno esté libre de riesgos para que los evacuados vuelvan a sus comunidades.
“Las manos que ayudan son de más bendición que los labios que solo oran”, acentuó el pastor Roberto Zambrano, director de ADRA Noreste.
Perla Silva, usuaria de Facebook, escribió “No te digo que todos pero hay mucha gente así y ellos son adventistas (…) esas personas no usan la Sierra tanto como todos los vacacionistas. Son los que se pusieron más pilas y que siempre lo han hecho para ayudar al prójimo, servir. Me consta porque los conozco, así que bravo a todos ellos y a toda la gente que está poniendo su granito de arena”, haciendo alusión a las labores de rescate que realizan los brigadistas de ADRA.
“Oramos con todo aquel que nos topamos y requiera palabras de ánimo. Y con el propio equipo de voluntarios de ADRA y comunidad en general” recalcó Acevedo.
“¿Servir?” menciona Manolo “es un estilo de vida, es religión práctica, es más bienaventurado dar que recibir”.
Actualmente en México hay 75 incendios activos que afectan a 20 estados del país.
Tu ayuda es indispensable:
BBVA Bancomer
Asociación Civil Filantrópica y Educativa A.C.
Cheques: 0196270409
CLABE: 0121800001962704092
Concepto: Incendio Forestal